Lavamos las frutas y sin pelar, las cortamos en rodajas o en gajos de más o menos 5 mm de grosor, ni muy finas ni muy gordas, reservamos.



Ponemos el agua junto con los 200 gr de azúcar, programamos 7 minutos, 100º velocidad 1.

Terminado el tiempo, agregamos la fruta cortada, programamos 7 minutos, 100º velocidad cuchara y giro a la izquierda.

Volvemos a programar 3 minutos sin temperatura y velocidad cuchara.

Comprobamos que la fruta está blanda la pulpa. No tiene que quedar demasiado cocinada para que luego podamos decorar cualquier postre antes de meterlas en el horno. (Roscón de Reyes)

Retiramos del vaso la fruta con cuidado y la colocamos sobre una hoja de papel vegetal.

Mezclamos la canela en polvo junto con 50 gr de azúcar y rebozamos la fruta en esta mezcla, después la ponemos en un recipiente y dejamos enfriar totalmente antes de usar.

Cuando enfrían quedan duras las cortezas y blanditas la pulpa, al comerlas con los postres es todo un contraste.

Para que la fruta os quede escarchada como la que venden en las tiendas

Repetimos y volvemos a meter en el almíbar la fruta, una vez fría sacamos y volvemos a rebozar en azúcar y canela tantas veces como sea nuestro gusto.

Dejar secar sobre papel vegetal la fruta ya escarchada y utilizarla al menos 8 horas más tarde,para que la capa de almíbar quede sólida.

Dependiendo del gusto de cada uno se puede además añadir algún licor al agua con azúcar (50 gr) y el sabor se acentúa. Con el almíbar que nos queda en el vaso podemos pasarlo a un recipiente pequeño y guardarlo en la nevera para confitar más fruta o para bañar algún bizcocho ó para hacer una crema para postre....son innumerables las posiblilidades.

La fruta podéis conservarla en un sitio fresco,no necesariamente la nevera y os aguanta perfectamente hasta 5 días.