Una de las más sorprendentes diferencias que marcamos con el Thermomix® , sobre todo por lo fácil que se nos hace traspasar algunas "fronteras", es el darnos el gusto de esas comidas o cenas informales que a tantos nos gustan pero que, si cuidamos nuestra alimentación, limitamos muchísimo a no ser que podamos prepararlas totalmente caseras. Es la diferencia entre comida rápida y comida basura, el disfrutar de una comida rápida no implica que se base en ultraprocesados industriales sino que podemos disponer de hamburguesas, salchichas, sus correspodientes panes y salsas completamente caseras y saludables, por poner el primer ejemplo que se me viene a la cabeza.

En Cookidoo tenemos muchísimas recetas para elegir y, en este terreno, el de las salsas es una gozada. Aprovechar los finales del verano para preparar el kétchup tradicional ya es un top para las siguientes temporadas, pero si queremos variedad o se nos termina el de tomate, el Kétchup de plátano está brutal y acompaña de maravilla no sólo a las carnes sino a pescados, verduras asadas, patatas y a donde se nos ocurra que puede encajar. Además también es una buena receta de aprovechamiento cuando se ponen los plátanos muy maduros.

Dura tres días en nevera, pero si queremos  guardarlo como conserva sólo tenemos que esterilizar los tarros y tapas y envasarlo nada más terminar la cocción y triturado, en caliente y cerrar bien. Ahí os aguantará por meses.